El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), el Departamento de Educación (ED) y la Administración de Servicios Generales de Estados Unidos (GSA) acogieron con beneplácito la declaración emitida por la Universidad de Columbia, en la que detalla las acciones que implementará en respuesta a una carta de la Fuerza de Tarea Conjunta para Combatir el Antisemitismo enviada el 13 de marzo. La comunicación establecía nueve condiciones previas necesarias para retomar negociaciones que permitirían restaurar contratos y subvenciones federales canceladas.
Las agencias federales calificaron el anuncio de Columbia como un paso inicial positivo para mantener una relación financiera con el gobierno federal.
“La universidad está demostrando cooperación adecuada con los requerimientos de la Administración Trump, y esperamos una resolución duradera”, expresó la secretaria de Educación, Linda McMahon. “He mantenido comunicación con la presidenta interina de Columbia, Katrina Armstrong, y agradezco su liderazgo y compromiso con impulsar reformas significativas en el campus”.
Entre las acciones inmediatas que la universidad comenzará a ejecutar se encuentran:
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Revisión de los procesos de admisión para garantizar objetividad y estudiar específicamente la disminución en las admisiones de estudiantes judíos.
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Aclaración de las restricciones sobre tiempo, lugar y forma de las manifestaciones, especificando que las protestas dentro de edificios académicos y áreas esenciales para las actividades universitarias no serán permitidas.
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Implementación estricta de una política contra el uso de mascarillas durante protestas, con sanciones como la expulsión del campus o detención por allanamiento.
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Cumplimiento de todas las leyes migratorias y de visado estudiantil en colaboración con el Departamento de Seguridad Nacional.
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Evaluación inmediata de los programas regionales de estudios, comenzando con los relacionados al Medio Oriente e Israel.
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Aplicación de políticas disciplinarias vigentes y finalización de procesos disciplinarios relacionados con ocupaciones y protestas en el campus, incluyendo el caso de Hamilton Hall.
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Reorganización de la Junta Judicial Universitaria, que pasará a estar bajo la Oficina del Provost y estará integrada exclusivamente por personal docente y administrativo.
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Aumento del personal de seguridad en el campus, facultado para arrestar y remover a personas que generen un ambiente inseguro o interfieran con las funciones académicas.
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Desarrollo del Centro Tel Aviv de Columbia, con programación prevista para el segundo trimestre de 2025.
El secretario del HHS, Robert F. Kennedy, Jr., declaró: “En lugar de generar condena universal, el holocausto del 7 de octubre desencadenó una ola global de antisemitismo. Las universidades de la Ivy League se convirtieron en invernaderos de odio. El presidente Trump ha ordenado utilizar todas las herramientas constitucionales para erradicar esta amenaza. Me complace que Columbia haya aceptado este primer paso para restaurar su misión como espacio de tolerancia, razón y respeto”.
La notificación oficial a Columbia fue emitida el 3 de marzo, indicando que sus contratos y subvenciones federales estaban bajo revisión por posibles violaciones al Título VI de la Ley de Derechos Civiles. Como respuesta a la falta de acción ante el acoso persistente a estudiantes judíos, se cancelaron aproximadamente $400 millones en fondos federales a la universidad.
El comisionado de la Fuerza de Tarea, Josh Gruenbaum, advirtió que “las universidades bajo investigación por la Fuerza de Tarea deben esperar el mismo nivel de escrutinio y acciones inmediatas si no protegen a sus estudiantes y frenan el comportamiento antisemita en sus campus”.
Para la comunidad puertorriqueña residente en Nueva York, donde se encuentra la Universidad de Columbia, se hace un llamado a mantenerse atentos a los cambios en las políticas universitarias, especialmente si tienen vínculos con instituciones de educación superior afectadas por estas medidas.

Samuel Beníquez, CEO y Editor en Jefe de TuVidaNews.com, tiene un MBA, MIT y PhD. Con una amplia trayectoria en medios de comunicación, ha recibido 43 premios locales, nacionales e internacionales, incluidos Emmy y miembro votante de los Grammy. Su experiencia incluye la redacción de contenido para redes sociales y motores de búsqueda, editoriales, publirreportajes y comunicados de prensa de ciencia, salud y bienestar para distintas empresas de la industria en Puerto Rico y Estados Unidos continental.